Sencilla, reconfortante y todo un ejemplo de aprovechamiento alimentario. Si quieres aprovechar el pan que te ha sobrado, te proponemos una variante de la tradicional sopa castellana. Una deliciosa crema de sopa de ajos con Aceite de Orujo de Oliva, yemas de huevo y taquitos de jamón.
Características :
- Nivel de dificultad:
- Tiempo de preparación:
- Número de raciones:
Origen de las sopas de ajo
La sopa de ajos tiene un origen humilde, ya que surge en tiempos de escasez en los que se añadía en una olla el pan que había quedado ya duro con otros ingredientes para dar sabor al caldo. Su origen se sitúa en Castilla y León, pero podemos decir que se ha convertido en un plato de gran arraigo en toda nuestra geografía. Con la base de pan y ajos, encontraremos variantes diferentes por regiones. En algunas de ellas, es además un plato típico de cuaresma.
¿Por qué preparar la sopa castellana con Aceite de Orujo de Oliva?
El Aceite de Orujo de Oliva reúne todas las características que necesitamos para lograr la crema perfecta. Al ser un aceite del olivar, destaca por su valor nutricional y culinario. También se caracteriza por su sabor neutro, por lo que acompañará muy bien esta receta equilibrando el sabor de los ajos y el pimentón. Además, curiosamente, como la propia sopa de ajos, podemos decir que el Aceite de Orujo de Oliva es todo un ejemplo de aprovechamiento alimentario. ¿Sabías que el Aceite de Orujo de Oliva es uno de los principales subproductos de la fabricación de aceite de oliva? Muchas razones que nos llevan a elegir este aceite para elaborar nuestra crema de sopa de ajos.
Ingredientes para Sopas de ajo, aprovecha el pan sobrante :
- Aceite de Orujo de Oliva
- 1 cabeza de ajos pequeña
- Media barra de pan del día anterior
- 50 gramos de taquitos de jamón
- 2 cucharadas de pimentón dulce: podemos poner un toque con pimentón picante
- 300 ml caldo casero
- 250 ml agua: Puede ser todo caldo o agua
- Sal
- 100 ml de soja
- 4 yemas
Una crema densa y deliciosa para los amantes del ajo, ¡Sigue todos los pasos!
- Colocamos la cabeza de ajos sobre la encimera y le damos unos pequeños golpes, así conseguimos que los ajos salgan de una forma más rápida. Una vez los tenemos, los pelamos y los picamos haciendo láminas.
- En una olla, añadimos suficiente Aceite de Orujo de Oliva como para cubrir su fondo y añadiremos los ajos para pocharlos. Es importante que removamos y que estemos atentos para que no se quemen, ya que esto podría hacer que se amargara el plato.
- Cuando los ajos comiencen a tener color, incorporamos los taquitos de jamón. Le damos un par de vueltas y retiramos la olla del fuego. Una vez tengamos la olla fuera del fuego, añadimos el pimentón y removemos. Haciéndolo así, evitaremos que el pimentón se queme.
- Volvemos a poner la cacerola en el fuego, rehogamos rápidamente y añadimos el pan duro cortado en rodajas. Como queremos que el pan se moje por completo con el Aceite de Orujo de Oliva, le damos la vuelta una vez incorporado a la olla.
- Cubrimos los ingredientes que tenemos en la olla con el caldo casero y con el agua y dejamos que la mezcla se cueza durante aproximadamente 10 minutos. En este punto podemos añadir una pizca de sal.
- Una vez pasado el tiempo, con ayuda de una batidora trituramos todo el contenido de la olla. Si vemos que ha quedado espeso, se puede añadir un poco más de caldo y lo volvemos a mezclar todo bien.
- Separamos las yemas de las claras en un cuenco, y las cubrimos durante 45 minutos en salsa de soja para que se maceren.
- A la hora de emplatar, colocamos primero la crema de sopa de ajo, sin añadir mucha cantidad de esta para que la yema no se hunda y la presentación quede perfecta. ¡Listo para disfrutar!
¿Qué te ha parecido esta receta de crema de sopa de ajos con Aceite de Orujo de Oliva? Si te gustan las sopas, es una opción deliciosa para disfrutar caliente como primer plato o para una cena ligera. Si, además, no te gusta tirar nada de comida, es el clásico plato de aprovechamiento de nuestra cocina de siempre.
