El olivar es una de las principales riquezas de nuestro país. No es de extrañar que, de uno de nuestros mayores patrimonios, proceda una de las variedades de aceite más completas del mercado: el Aceite de Orujo de Oliva. Te mostramos cuáles son sus principales beneficios y propiedades.
Propiedades nutricionales del Aceite de Orujo
Las principales propiedades nutricionales de este aceite serían:
- El Aceite de Orujo de Oliva tiene una composición rica en ácidos monoinsaturados y equilibrada en ácidos grasos insaturados como la de los aceites de oliva.
- Se compone mayoritariamente de ácido oleico, que puede representar hasta el 80% del total.
- El efecto saludable de las grasas monoinsaturadas en la dieta se relaciona con la prevención de enfermedades cardiovasculares, así como con el control de los niveles de colesterol, ayudando a reducir el colesterol “malo” y aumentar el “bueno”.
- Se caracteriza también por un alto contenido de compuestos de interés nutricional, los denominados compuestos menores, con una presencia del 2%. A nivel antioxidante destacan los fenoles y los tocoferoles, precursores de la vitamina E.
- A nivel antiinflamatorio los alcoholes triterpénicos y los alcoholes alifáticos, que encierran especial interés porque son exclusivos del Aceite de Orujo de Oliva.
Esta última singularidad ha sido objeto de estudio en recientes investigaciones científicas sobre el aceite de orujo, que profundizan en el efecto positivo de estos elementos en la dieta.
Beneficios del orujo de aceite en la cocina
Vista su interesante composición nutricional, ¿Cómo podemos sacarle el máximo partido en la cocina? Su calidad, durabilidad y resistencia le posicionan a la cabeza del ranking de los aceites más recomendados para fritura. Estas son las principales ventajas de freír con Aceite de Orujo de Oliva:
- Calidad: Un aceite del olivar, rico en ácido oleico y con componentes bioactivos exclusivos, garantía de calidad dentro de una alimentación equilibrada y saludable.
- Durabilidad: Manteniendo las condiciones adecuadas, puede utilizarse en numerosas ocasiones sin deteriorarse. En concreto, más del doble de veces que el aceite de girasol convencional según los ensayos realizados por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
- Rentabilidad: Su durabilidad y precio accesible se traducen en rentabilidad con el consiguiente ahorro económico.
- Resistencia: La temperatura óptima en fritura es de 170-190ºC. El Aceite de Orujo de Oliva es más resistente y no alcanza su punto de humo hasta los 230-240º, por lo que tendremos mucho menos riesgo de estropear el aceite.
- Textura: Con una buena técnica, es más fácil conseguir el acabado ideal de una fritura: crujiente por fuera y esponjosa por dentro, con la absorción justa de aceite.
- Sabor: El Aceite de Orujo de Oliva tiene un sabor suave, ideal para aquellos que quieran disfrutar del sabor original de los alimentos.
Croquetas, patatas, tempura, pescado… El Aceite de Orujo de Oliva es una apuesta segura para freír, pero sus características organolépticas neutras nos abren muchas más posibilidades ofreciendo muy buen resultado en repostería, en guisos, sofritos y salsas como la mayonesa. Esta versatilidad es otra razón más para que no falte en la despensa.
Beneficios para el consumidor
Los beneficios del Aceite de Orujo de Oliva no acaban aquí. Detrás del Aceite de Orujo de Oliva hay mucho más que un producto alimentario único. Durante su producción, el sector orujero realiza una gran labor medioambiental, ejemplo de economía circular y residuo cero, ya que consigue valorizar todo el subproducto de las almazaras, haciendo sostenible la producción de aceite de oliva en nuestro país. Por lo tanto, el Aceite de Orujo de Oliva es además todo un ejemplo de aprovechamiento alimentario, un beneficio a tener muy en cuenta dentro de un patrón de consumo responsable. Un tema que bien merece otro post.